Santa Estampa

Si la gente supiera. Uno no se puede meter con los santos. San Fulanito concédeme tal o cual. Resulta que tal o cual no puede ser concedido hasta que la promesa a San Fulanito resulte concreta, respaldada por una Carta de Intenciones con sus respectivos soportes y luego entonces, sí y sólo sí, a San Fulanito le da la gana de pedirle al Jefe que le eche una mano para que Pepito de los Palotes (o Pepita si se diera el caso) obtenga tal o cual, obtendrá entonces Pepito, tal o cual. Lo cual, a su vez sería posible, siempre que el Instituto Autónomo de Santos y Misceláneos, no esté aún invadido por el virus burocracis . Pero quién sabe, sólo los Santos y sus inferiores y sus superiores, pero nadie más. No, nadie más. Es muy importante no olvidar la estampa húmeda de cualquiera sea la unidad según sea el tal o el cual. Muy importante. Sin estampa no se moviliza nada. No hay manera. La estampa debe ir abajo, al lado de la firma del santofuncionario, quien con ella, verifica que todo esté correcto, original contra copia. Si el original no está, no hay nada que hacer. Pepito puede dejar allí sus demandas, allí sobre la pila de otros pedidos a otros santosfuncionarios pero de nada le sirve. Entonces, el original, la copia, la estampa, la firma y la suerte puede que le ayuden en la diligencia que San Fulanito está autorizado para hacer por usted; sin embargo, es preferible que pase Martes o Jueves de nueve a once, ni un minuto más ni un minuto menos, para verificar con el Jefe (es decir, el que todo lo puede) a ver si, además de hacer su trabajo, le puede echar una manito a San Fulano para que haga el propio.